• Mientras edil de Xoxocotlán Chente Castellanos sigue de pachanga en pachanga, índices de inseguridad de despuntan y van en incremento desmedido
• Balaceras por las madrugadas y apagones de energía eléctrica para favorecer delincuencia, Chente Castellanos y criminales coludidos

Mientras la policía municipal de Xoxocotlán se encarga de vandalizar y borrar bardas, la violencia e inseguridad aterrorizan a las familias xoxeñas, quienes viven bajo la incertidumbre y preocupación por el constante acoso de grupos criminales.

Este municipio de los Valles Centrales que gobierna el priísta Inocente Castellanos Alejos se convirtió en los últimos años en territorio del cartel de jalisco nueva generación y del cartel de Sinaloa, ante el desinterés o la falta de capacidad de la actual gestión.

Las colonias Mi Ranchito y La Soledad son algunas de las colonias identificadas por la intensa actividad de narcomenudistas, quienes – según los vecinos- pese a las constantes denuncias nunca son molestados; sin embargo hacen de estos lugares zonas de riesgo para las familias que aquí viven.

Sucesos delictivos como el ocurrido el pasado 11 de abril en inmediaciones del muy transitado Monumento a Juárez, donde fue encontrado un cuerpo desmembrado; balaceras a diferentes horas en zonas como el Fraccionamiento Aguayo el pasado 14 de julio, o a escasos metros de una primaria en el mes de enero donde perdieron la vida dos personas, lamentablemente se están volviendo cotidianos en la zona.

Mención aparte merece el enfrentamiento en la Colonia Mineria el 13 de febrero, donde perdió la vida un policía y resultó herido uno más, quienes fueron abandonados por el edil de tal suerte que sus compañeros se manifestaron en paro de labores hasta que recibieron respuesta.

Por la forma en que se han suscitado estos hechos se relacionan con el crimen organizado, incluso por autoridades estatales y federales de seguridad públicamente han aceptado la presencia de células delictivas, ante la irresponsabilidad de un presidente que parece más preocupado por su imagen que por sus gobernados

Por temor a represalias, los elementos policiales han guardado silencio ante las irregularidades que viven, al ser obligados a desatender sus actividades de protección ciudadana, para realizar encargos personales del edil, como los que trascendieron la mañana del jueves, donde fueron llevados a tachar bardas con propaganda de Claudia Sheinbaum, corcholata morenista para la presidencia del país.

La ciudadanía exige a Inocente Castellanos implementar una estrategia de seguridad y dejar la promoción personal y los favores a sus amistades, al criticar que gaste el recurso en festejar a sus allegados y ponerle su nombre a las calles, cuando Xoxocotlán esta a merced de la delincuencia.